De acuerdo al informe de Global Entrepreneurship Monitor (GEM), presentado el mes pasado, sobre la iniciativa empresarial, las personas más jóvenes son 1.6 veces mas propensas a querer iniciar su propio negocio, en comparación con sus colegas mayores.
“Juventud” es una categoría donde GEM engloba a adultos de entre 18 y 34 años. Y son quienes están recurriendo a la iniciativa empresarial en respuesta a un mercado de trabajo complicado y a una economía lenta.
“La falta de oportunidades de empleo, especialmente entre los jóvenes, es un problema importante en el mundo”, dijo Mike Herrington, director ejecutivo de GEM en un comunicado. «Esto ha sido exacerbado por la crisis financiera y la recesión económica mundial. Por lo que fomentar la actividad empresarial eficaz entre los jóvenes es visto como una estrategia fundamental de desarrollo con el fin de integrarlos en el mercado laboral y aprovechar su potencial para contribuir al desarrollo económico sostenible”.
El informe de GEM encontró que, a pesar de que las personas mayores de 34 años están empezando menos empresas que los jóvenes emprendedores, sus compañías tienen más probabilidades de sobrevivir a los primeros tres años y medio.
Otro factor es que, las organizaciones fundadas por los jóvenes también son típicamente operadas por una sola persona (73% tienen menos de 24 años), lo que significa que estas empresas no están proporcionando muchos puestos de trabajo para los demás.
Aunque resulta que, un fuerte impulso empresarial, no es suficiente para garantizar el éxito. Alrededor del mundo, el espíritu emprendedor sigue creciendo en la mente de los jóvenes trabajadores. Aunque esa iniciativa no hace realidad sus ideas.
De hecho, cuando se trata de poner en marcha un negocio, la población joven habla mucho, pero actúa poco. En Estados Unidos y Canadá, el 19% de los jóvenes manifestó intenciones emprendedoras, pero sólo el 8% las llevaron a cabo. Ambos porcentajes son mucho más altos en las regiones de Asia meridional y oriental, pero caen en una proporción similar. En esas regiones, el 52% quiere iniciar un negocio, pero sólo el 28% lo hace realidad.
«Tenemos que encontrar la manera de sacar provecho de la motivación de los jóvenes que están dispuestos a iniciar negocios, pero que pueden carecer de las habilidades y de las redes que necesitan para el éxito», dijo Thomas Schott, un profesor de iniciativa empresarial en la Universidad del Sur de Dinamarca y principal autor del informe.
Fuente: Mundo Ejecutivo